
El huevo es un alimento de declaración obligatoria según la normativa europea actual. La clara de huevo es más alergénica que la yema. Por otro lado, se han descrito más reacciones alérgicas cuando el huevo se ingiere crudo que cuando se ingiere cocido. A continuación se detalla una lista de nombres que pueden indicar la presencia de huevo: clara de huevo, conalbúmina, ovotransferrina, lisozima, ovalbúmina, ovomucoide, yema de huevo, levadura, albúmina, coagulante, emulsificante, globulina, lecitina (E-322) a no ser que indique que es de soja, livetina, ovomucina, ovovitelina, vitelina, luteína o pigmento amarillo (E-161b), lisozima (E-1105), huevos de ave (gaviota, pato, codorniz). El huevo es una de las causas más frecuentes de alergia alimentaria en niños menores de 5 años. Si un paciente es alérgico al huevo de una ave, la probabilidad de ser alérgico a los huevos de otras aves es muy elevada por la similitud entre sus proteínas. El huevo se utiliza como aditivo alimentario y esto hace que a menudo se encuentre como alérgeno oculto.